HERMANAS TERCIARIAS CAPUCHINAS IV CAPÍTULO PROVINCIAL 2023 2° día

ornada de retiro Padre Capuchino, Néstor Bernardo Molina. «Sin espiritualidad no hay renovación » Vida en el Espíritu .

El padre, partiendo de la RegB 10,7-12, Comenzamos con dos preguntas:¿puede un hombre medieval decirnos algo a nosotros hombres y mujeres del siglo XXI?¿será conveniente escuchar a un hombre idealista y radical como el hermano Francisco? Y descubrimos que si hoy nos sigue Invitando sus palabras a mirarnos hacia dentro nuestro ser HERMANA. El momento de adoración al Santísimo ha sido, también, una ocasión para orar, desmenuzar y saborear las oraciones de San Francisco, «Alabanzas al Dios Altísimo» y «Oh alto y glorioso Dios». En la sesión de la tarde las capitulares han sido invitadas al cuidado y el cultivo de la vida interior, alcanzando con la practica del silencio, una forma de comunicación compasiva y consciente. Para que todo esto sea posible, si queremos mirar al otro, hemos de aprender a mirar de una vez con compasión y amor.

IV Capítulo Provincial de las Terciarias Capuchinas de la Sagrada Familia, Provincia Nazaret

Iniciamos nuestro IV Capítulo provincial el Domingo de Resurrección, el día de Pascua. El dia más grande para los cristianos.

Jesús le dice: «¡María!»
Ella se vuelve y le dice: «¡Rabboni!», que significa: «¡Maestro!»
Jesús le dice: «Suéltame, que todavía no he subido al Padre. Anda, ve a mis hermanos y diles: «Subo al Padre mío y Padre vuestro, al Dios mío y Dios vuestro.»»
Buscamos a alguien, a veces desesperadamente, que nos conozca y a quien conocer: una voz que diga nuestro nombre.
Es el mejor regalo que pueden hacernos. Es la manera para empezar a ser, para crecer en el ser. Para aprender que somos un milagro. Sólo a quien nos conoce y nombra podremos llamar maestro con fundamento.

Con la celebración de inicio en la Casa de Montiel, símbolo de nuestras raíces carismáticas, las hermanas capitulares se han predispuesto a celebrar con intensidad, con corazón disponible y espíritu abierto nuestro el IV Capítulo provincial.

La Hna. María Luisa García Casamian, TC, Vicaria General de la Congregación presidir el Capítulo que concluirá el 14 de abril de 2023, en representación de la Superiora General, Hna. Blanca Nidia Bedoya Salazar, TC.

JORNADA MUNDIAL DE LA PAZ

En esta Navidad del año 2022 de una manera especial nos resuena el anuncio de los ángeles a los pastores:

“¡Paz a la tierra!”

Este deseo y esta promesa desde el año 1968 la iglesia católica lo acogió con la proclamación del primer día del Año Nuevo como jornada de oración por la paz bajo la protección de la Virgen Maria.

El Papa Pablo VI inició esta celebración por las tensiones tan fuertes, que entonces vivía la humanidad: Guerra de Vietnam, guerra de “seis días en Israel y en el Oriente Medio”, guerra de Biafra en Nigeria, brutales conflictos entre razas en USA …

Hoy como entonces las tensiones siguen, están en otras partes del mundo. Todos palpamos como también hoy necesitamos el común esfuerzo por lo menos de orar por la Paz con todo nuestro ser y dedicación.

 “Nadie puede salvarse solo”

Recomenzar desde el COVID-19 para trazar juntos caminos de paz.

Este es el lema de la Jornada Mundial de la Paz 2023. El Papa Francisco dice: “Después de haber palpado la fragilidad que caracteriza la realidad humana y nuestra existencia personal, podemos decir que la mayor lección que nos deja en herencia el Covid-19 es la conciencia de que todos nos necesitamos”.

En esta línea, el Papa agregó: “Nuestro mayor tesoro, aunque también el más frágil, es la fraternidad humana, fundada en nuestra filiación divina común, y de que nadie puede salvarse solo”. Asimismo, mencionó las problemáticas del mundo actual, sin dejar de mencionar la guerra en Ucrania. Y siguió: «En el momento en que nos atrevimos a esperar que lo peor de la noche de la pandemia se había superado, un nuevo y terrible desastre se abatió sobre la humanidad.”

“Fuimos testigos del inicio de otro azote: una nueva guerra, en parte comparable a la del Covid-19, pero impulsada por decisiones humanas reprobables.

La guerra en Ucrania se cobra víctimas inocentes y propaga la inseguridad, no sólo entre los directamente afectados, sino de forma generalizada e indiscriminada hacia todo el mundo; también afecta a quienes, incluso a miles de kilómetros de distancia, sufren sus efectos colaterales -basta pensar en la escasez de trigo y los precios del combustible-”, se explayó.

Además, Francisco sostuvo: “Ciertamente, el virus de la guerra es más difícil de vencer que los que afectan al organismo, porque no procede del exterior, sino del interior del corazón humano, corrompido por el pecado (cf. Evangelio de Marcos 7,17-23)”.

Francisco termina encomendando el mundo entero a la Virgen María: “A todos los hombres y mujeres de buena voluntad, les deseo un feliz año, en el que puedan construir, día a día, como artesanos, la paz. Que María Inmaculada, Madre de Jesús y Reina de la Paz, interceda por nosotros y por el mundo entero”.

Así todos estamos invitados a acoger esta nueva llamada de orar por la Paz.

Ursula Leuffen

            JPIC, Provincia Nazaret

Visita de la Superiora general y Vicaria al sepulcro del P. Luis Amigó en Massamagrell

La Hna. Blanca Nidia Bedoya Salazar, Superiora general, junto con Hna Marisa García, Vicaria general visitaron el sepulcro del P. Fundador, el día 10 de octubre, para orar de manera especial antes de comenzar su recorrido en este servicio de gobierno.

El día 11 se celebró una eucaristía en nuestra capilla de Massamagrell a la que se invitó a las Hermanas de las comunidades vecinas. Participaron prácticamente todas. A continuación, Hna Blanca Nidia les dirigió unas palabras alentadoras y compartieron una generosa merienda cena.

También se desplazaron hasta la Casa de Espiritualidad de Nuestra Señora de Montiel, el día 12 donde saludaron y conversaron con las Hermanas y recorrieron todas las instalaciones, compartiendo la mesa también con la comunidad. En ambas casas dejaron huella de su paso firmando en el libro de visitas.

En sus últimos días de estancia en España,

Hna Blanca Nidia, acompañada de Hna Marisa visitó las comunidades de los Hogares “Luis Amigó” y “El Olivo” de Madrid, quedando muy contenta con la tarea desarrollada por las Hermanas y los laicos.

SOLO ÉL ES EL PRÍNCIPE DE LA PAZ

Esta foto dio la vuelta al mundo. El fotógrafo ucraniano Dennis Melnichuk, cristiano evangélico, la publicó en las redes sociales después de tomarla frente a la iglesia de un monasterio católico en Lviv (Leopolis) el 24 de febrero de este año.

“Eso fue –escribió- unas tres horas después de que estallaran las primeras bombas en Kyiv.” Se formaron enormes filas afuera de los bancos, farmacias y tiendas, todos tratando de abastecerse de suministros, sin saber qué iba a pasar a continuación, y este hombre, en cambio, oró al pie de la cruz, a la que rodeó con sus brazos.

Este hombre, en el interior de su corazón, habría sentido que nosotros, los hombres somos incapaces de pacificar pues es sólo Dios quien puede traer la paz al mundo actual que está roto (Filipenses 4, 6-7). Solo él es el Príncipe de la Paz.

La paz, algo delicado y frágil.

En cualquiera de los terrenos que se considere, la paz es una realidad delicada y frágil. Los más de 50 conflictos armados que afligen al planeta nos lo confirman. Es posible que la rutina informativa nos haya anestesiado contra ellos y sobre todo, si suceden lejos, ya no nos afecten. Esto ocurre, sobre todo, con los conflictos que sufren los países empobrecidos.

Pero basta que se desencadene un conflicto entre poderosos (como la guerra entre Rusia y Ucrania) para que todo el mundo entre en crisis. Creíamos que el fantasma de la guerra no existía porque estaba lejos, pero llama a nuestras puertas y el desconcierto nos inunda.

Es frágil la paz entre los humanos. Incluso a nivel personal es también así. La paz huye fácilmente de la casa del corazón. Por eso insistía tercamente Francisco de Asís dirigiéndose a sus hermanos: “Que la paz que anunciáis de palabra, la tengáis, y en mayor medida, en vuestros corazones” (TC 58).

La paz, en el núcleo central de la espiritualidad franciscana.

El tema de la paz ha pasado a ocupar un puesto central en el núcleo de la espiritualidad franciscana, junto con la pobreza, la minoridad, la fraternidad o la alegría. De esta manera, la paz adquiere rango espiritual de primer orden: no es solamente una virtud humana, sino el camino para el logro cristiano, para la “salvación”.

«En toda predicación que hacía, antes de proponer la palabra de Dios a los presentes,  les deseaba la paz, diciéndoles: “El Señor os dé la paz”. Anunciaba devotísimamente y siempre esta paz a hombres y mujeres, a los que encontraba y a quienes le buscaban.» (1Cel 23).  

La comprometida oración por la paz.

El don de la paz no es una dádiva graciosa que se ha de lograr sin el compromiso, verdadero trabajo espiritual, del creyente. Orar por la paz es comprometerse en los trabajos por la paz. Efectivamente, la oración constante por la paz supone un acercamiento a los conflictos humanos y a la postre, una indudable implicación. La oración constante tiene la virtualidad de comprometer a los orantes que perciben que una oración sin compromiso es una oración sin raíces.

Celebración del Espíritu de Asís el 27 de octubre 2022

Orar por la paz es elegir el bien y trabajar por la paz sobre todo en estos momentos del año 2022 tan confusos y terribles donde la palabra guerra resuena en cada esquina.

Se acerca la fecha de la celebración del Espíritu de Asís,  el 27 de octubre, bajo el lema:

¿qué es el espíritu de asís?

  • Un soplo del Espíritu Santo para lograr armonía y paz en el mundo, inspirado en el Hermano Francisco.
  • Una propuesta para recorrer caminos de encuentro, de diálogo y amistad, con cristianos de diversas denominaciones y con todos los creyentes en Dios.
  • Tiene su inicio el 27 de octubre de 1986. El Papa, S. Juan Pablo II hizo realidad un gran sueño, invitando a los representantes de las diversas religiones del mundo a Asís, para que se elevase a Dios, en diversas lenguas, un solo canto de paz.
  • La invitación fue aceptada por 70 representantes de éstas, quienes compartieron juntos la esperanza de construir un mundo mejor, profundamente renovado y mucho más humano.
  • La familia franciscana ha seguido celebrando este día con la convicción de que el mundo, la sociedad, la familia está necesitada de paz.
  • Se celebra todos los años el día 27 de octubre. Es una fiesta para la familia franciscana. En todos los conventos franciscanos, junto a la OFS se celebra una jornada de oración por la Paz en el mundo.

Nosotras, las hermanas Terciarias Capuchinas, nos unimos a este espíritu de Asís e invitamos a unirse con toda la familia franciscana a orar por el don de la Paz.

GRACIAS A TODAS Y TODOS

Desde el día 24 de febrero 4,75 millones de refugiados ucranianos cruzaron la frontera de Polonia, sobre todo mujeres y niños. Algunos se han ido hacia otros países de Europa, Estados Unidos y Canadá. Otros, después de un tiempo, han vuelto a su país, pero se calcula que unos 3 millones permanecen aquí. En toda Europa en estos momentos se calcula que hay unos 5,8 millones de refugiados ucranianos. Mujeres, madres con hijos, abuelas, chicas jóvenes… de un día para otro han dejado atrás toda su vida, sus maridos, padres y hermanos, todas sus pertenencias… y han emprendido un camino hacia lo desconocido buscando un lugar seguro, sin bombas y violencia.

Desde la Congregación de Hermanas Terciarias Capuchinas de la Sagrada Familia, a través de la comunidad de Polonia, desde el primer momento hemos respondido a la necesidad de dar refugio y ayuda a los que llegaban. 

Y así, gracias a la generosidad de muchas personas e instituciones, primero hemos reformado nuestra casa, creando en ella tres espacios acogedores y cómodos para tres familias ucranianas (el primero de ellos lo teníamos listo ya el 26 de febrero, es decir, el tercer día de la guerra). Cada uno de los espacios cuenta con una parte de cocina, dormitorio y salón para crear una pizca de intimidad para cada familia. En diferentes momentos hemos convivido con una o hasta cuatro familias (en el momento más complicado han llegado a reunirse catorce  personas refugiadas en nuestra casa). 

Cuando el espacio en nuestra casa se terminó alquilamos tres pisos (pagando los alquileres y las facturas de agua, gas, electricidad, etc.) para otras familias que nos llegaron y a las que ya no pudimos albergar en nuestra casa. A unas y otras les apoyamos económicamente para que no les falte lo básico como alimentos, ropa, calzado o acceso a internet, es decir,  el contacto con sus familiares en Ucrania e información. Pero también compramos muebles, lavadoras, frigoríficos y utensilios necesarios para una cierta comodidad.

En todo momento hemos intentando dar un poco de normalidad a sus vidas: celebrando juntos las fiestas ucranianas y polacas, los cumpleaños, ayudando con los trámites oficiales, en la búsqueda de trabajo para las mamás y abuelas o colegio para los niños… Y sobre todo escuchando sus miedos y compartiendo su dolor. En total son ocho familias con sus nombres e historias concretas que han estado viviendo (o continúan) en nuestra casa o alguno de los pisos alquilados. 

La generosidad y confianza depositada en nosotras nos ha permitido también ayudar económicamente y con los bienes (medicinas, powerbank, leche específica para niños minusválidos, alimentos, productos de limpieza y aseo, cremas y alimentos para bebés, etc) a las instituciones y personas particulares de las que sabíamos que llevan la ayuda humanitaria directamente a las personas y zonas más afectadas por la guerra en Ucrania. Hemos apoyado de esta forma varios transportes humanitarios.

Al igual que a otras dos congregaciones de la familia franciscana que tienen sus comunidades en Ucrania, ya que sus conventos se han convertido todavía más, si cabe, en un lugar donde la gente y sobre todo los que huyen de la zona de la guerra llaman, diciendo: “Hemos oído que aquí podemos recibir ayuda”. Conscientes de que las mismas hermanas conocen mejor las necesidades concretas de cada lugar, de la población y de las personas que se refugian en sus conventos les hemos confiado una parte de los donativos recibidos y sabemos que ha sido gastada en alimentos, ropa, calzado, útiles de aseo, etc. repartidos posteriormente a los necesitados. 

Aparte de la colaboración económica y acogida directa de los ucranianos, intentamos estar atentas en el día a día a las necesidades de los refugiados de nuestro entorno y colaboramos en forma de voluntariado con las instituciones y personas que organizan la ayuda (en un centro de tiempo libre para niños ucranianos, en la acogida de los refugiados en la estación de trenes, en un almacén donde llegan y se reparten gratuitamente alimentos, productos de aseo y ropa para los refugiados).

Las necesidades son grandes y tenemos el invierno por delante.  Sabemos que la situación con las subidas de precios y posible falta de gas se hará muy complicada para muchas familias, tanto ucranianas como polacas y de muchos otros países… Aquí seguiremos aportando lo que somos y tenemos.

Nuestra ayuda no tendría tanto alcance sin la colaboración y la generosidad de tantas personas, Congregaciones religiosas, parroquias, colegios y diferentes Instituciones que han confíado en nosotras como mediadoras haciéndonos llegar su aporte económico.

Con total transparencia procuramos que vuestras aportaciones pasen directamente de vuestras manos a quienes de verdad lo necesitan.

GRACIAS A TODOS VOSOTROS POR VUESTRA CONTRIBUCIÓN A ALIVIAR TANTO SUFRIMIENTO.

Hermanas Terciarias Capuchinas de la Sagrada Familia de Wrocław, Polonia

Ursula, Milena, Bożena y Alicja

“Levántate, empieza el camino”. Los jóvenes con la cruz de la JMJ.

El pasado viernes, 1 de octubre, la explanada de la catedral de la Almudena de Madrid se ha llenado de más de 3.000 jóvenes. ¿Por qué motivo? La cruz de la Jornada Mundial de los Jóvenes (JMJ) llegó a Madrid. Una cruz que es señal del cristianismo, signo del seguimiento de Cristo, de amor y de paz, y que ha viajado por el mundo entero, de mano en mano, de país en país. Este día se ha celebrado el festival Los jóvenes con la cruz de la JMJ.
Los orígenes de esta cruz peregrina se remontan al Año Extraordinario de la Redención, celebrado entre 1983 y 1984. El Papa Juan Pablo II instaló junto al atar de san Pedro una cruz que permaneció allí todos los días del jubileo. Al concluir aquel año, el santo polaco se la entregó a los jóvenes del mundo representados en una Delegación del Centro Internacional Juvenil San Lorenzo de Roma. Les encomendó la misión de llevarla por el mundo como signo del amor del Señor Jesús a la humanidad y anunciar que solo en Cristo muerto y resucitado hay salvación y redención.
Las hnas. Mati Mena, Mária Herichová y Gosia Skiba participamos y disfrutamos de esta celebración tan entrañable y conmovedora. En primer momento, después de una larga espera, recibimos solemnemente la cruz de la JMJ. Los jóvenes peregrinaron con la cruz por todo el perímetro acompañados de los himnos de las jornadas anteriores, cantados con mucho entusiasmo. Monseñor José Cabo recibiendo la cruz hizo subrayó que en está cruz, están todos los sueños y todas las esperanzas, todas las experiencias y todos los esfuerzos, de todos y cada uno de los ámbitos de presencia de Cristo de esta Iglesia joven.
A continuación disfrutamos de un concierto testimonio de Grilex, Toño Casado, Paola Pablo, Hakuna, María Valongo y Jesús Cabello, que con su talento musical compartieron su experiencia de Dios. Ha sido un momento de mucha alegría. La explanada de la catedral se ha llenado de luces, de aplausos y gritos de regocijo, entre ellos repetíamos varias veces: ¡Esta es la juventud del Papa!
La celebración concluyó con la Vigilia Adoremos presidida por el cardenal Carlos Osoro. En esta noche marcada por la alegría de nuestra fe y por el amor de Dios expresado en la cruz, nos hemos unido en la oración para poder escuchar al Señor que nos llama y nos envía para recorrer los caminos del mundo amando como Él nos ha amado. En su homilía, el cardenal, nos invitó a conocer más a Jesucristo. Conocerlo, encontrarlo y caminar con Él e identificarnos con Él, no teóricamente sino encontrándonos con Él, es la misión fundamental a la que el Señor nos llama. Al final de la celebración, cardenal Osoro, bendijo una réplica de la cruz de la JMJ.
Hna. Mati:
Una experiencia de Iglesia joven en la que era palpable la presencia de Jesús. ¡Esta es la juventud del Papa!
El recibir la cruz de la JMJ, esta cruz peregrina por todo el mundo me llevaba a tener presente los sufrimientos y esperanzas de nuestro mundo, de nuestra Iglesia, nuestra Provincia, realidades de dolor……. y a la vez adorando al Señor que transforme todo ello en vida, en resurrección…
a cruz peregrinará por las distintas vicarías de la diócesis.
Hna. Mária:
El encuentro de los jóvenes con la cruz me ha hecho revivir y me ha llenado de esperanza, la que brota únicamente de la cruz, la que tace levantar y ponerte en camino. Sí, todo el canto, alabanza, gritos y oración en silencio al unísono proclamaba: ¡Me levanto y me pongo en camino, porque quiero conocer a Jesucristo, vivo y verdadero!
Hna. Gosia:
Para mí personalmente ha sido un tiempo de gracia. En esta celebración he podido experimentar el amor de Dios manifestado en la cruz, mirar la cruz y tener presente en el corazón tantas realidades donde Jesucristo quiere manifestarse con su amor para dar vida…
De tanta emoción se me ponía la piel de gallina al ver tanta gente joven rezando, cantando, alabando y adorando al Señor. Me venían a la mente los encuentros de jóvenes en Polonia que me han marcado

REUNIÓN PRESENCIAL DEL EQUIPO DE LA PASTORAL JUVENIL VOCACIONAL DE LA PROVINCIA NAZARET

PASTORAL JUVENIL VOCACIONAL

Después de un largo tiempo de reuniones online, por fin nos llegó el día de una reunión presencial. Nos encontramos la hna. Lourdes Crespo, hna. Alicja Grzywocz, hna. Gosia Skiba y Sonia Aguliar los días 23 y 24 de septiembre en Meliana.
A lo largo de esta reunión revisamos nuestro Proyecto de Pastoral Juvenil Vocacional para el trienio 2020 – 2022 y con mucha ilusión elaboramos el calendario de actividades previstas para este nuevo curso 2021 – 2022.