COMUNIDAD P. LUÍS MASSAMAGRELL

COMUNIDAD BARAKALDO
Iniciamos el día con María en su soledad, al pie de la cruz. Lo celebramos comunitariamente y prolongamos el silencio y la oración a lo largo del día.
Iniciamos el día con María en su soledad, al pie de la cruz. Lo celebramos comunitariamente y prolongamos el silencio y la oración a lo largo del día.
Todas las comunidades nos preparamos para vivir esta Semana Santa, en casa, pero en profundidad.
MADRID. CURIA PROVINCIAL
Desde la víspera, aparecía colgando de la terraza un ramo de laurel, saludando a Jesús que nos invita a seguirle y queriendo con ello, también saludar a vecinos y vecinas en esta situación de confinamiento que vivimos.
Iniciamos el Domingo de Ramos con Laudes,. La ambientación, de Ángel Moreno, de Buenafuente: “Jesús parece que lleva prisa, sube decidido y remonta la pendiente que va de Jericó a la ciudad santa de Jerusalén,… no hay tregua. El Maestro confía a los suyos la razón de ir a la ciudad: su próxima Pasión. El miedo acosa a los discípulos,… rehúyen las palabras del Señor, sin querer enterarse del drama que guarda Jesús en su interior.
Jesús sube a Jerusalén para dar la vida, no se la quiten, sino por ofrenda de amor. “Nadie tiene amor más grande que aquel que da la vida por sus amigos”,… “Vosotros sois mis amigos”.
Estos días, no resistimos tantas noticias dolorosas. El temor al contagio, la pérdida de seres queridos: un horizonte terrible. Jesús nos invita a ir tras Él, para que podamos comprender nuestra mortalidad y transformar nuestro dolor con el suyo. No dejemos pasar este momento, lo podremos vivir evadidos, por miedo; aturdidos, por dolor; pero también podemos llevar el ramo del testigo, del mártir, de quien toma la palma de la entrega personal y solidaria.
Cada uno podemos gritar, si es preciso, y con ello descansa el corazón, no solo: “Hosanna al Hijo de David, Bendito el que viene en nombre del Señor”, sino también, como el ciego: “Jesús, Hijo de David, ten piedad de nosotros”.
Otro momento muy importante la Eucaristía desde el Vaticano, junto al Papa, ¡¡¡emotivo e impresionante…!!! y a las 20 horas el aplauso desde los balcones y terrazas en homenaje a los sanitarios y a cuantos luchan contra el coronavirus.
Hemos comenzado el día con la oración de laudes, preparada con esmero. Estos días vamos a tratar de cuidar la liturgia y el canto, y por ello hemos dedicado antes tiempo a ensayar. Hemos disfrutado de un desayuno especial, con bizcocho y chocolate.
A las 11:00h hemos participado en la eucaristía presidida por el Papa, en este Domingo de Ramos. Cada hermana teníamos un ramito de arbusto que evocaba el olivo. La comida también ha sido especial y festiva y hasta con sobremesa.
Tras los aplausos de las 20:00 h, hemos rezado también solemnemente vísperas, uniéndonos a los creyentes y a tantos que hoy están entregando gratuitamente su vida.
Hemos comenzado el día con la oración de laudes, preparada con esmero. Estos días vamos a tratar de cuidar la liturgia y el canto, y por ello hemos dedicado antes tiempo a ensayar. Hemos disfrutado de un desayuno especial, con bizcocho y chocolate.
A las 11:00h hemos participado en la eucaristía presidida por el Papa, en este Domingo de Ramos. Cada hermana teníamos un ramito de arbusto que evocaba el olivo. La comida también ha sido especial y festiva y hasta con sobremesa.
Tras los aplausos de las 20:00 h, hemos rezado también solemnemente vísperas, uniéndonos a los creyentes y a tantos que hoy están entregando gratuitamente su vida.
Como está ocurriendo a muchos, este momento de los aplausos nos está permitiendo entablar más relación con los vecinos. Ha sido para nosotras un día festivo dentro del sufrimiento que nos acompaña estos días.
Con las hojas de las plantas que teníamos en el patio hemos realizado esta pancarta que hemos expuesto en la ventana. En ella han colaborado los niños y niñas del Hogar. Ha sido un momento de entusiasmo y de ánimo, tanto para nosotras, como para los vecinos que nos han mostrado su admiración. También con esta foto hemos felicitado este día a nuestras familias, amigos y conocidos. La verdad es que este confinamiento está haciendo que la ventana sea nuestro medio para testimoniar la fe, así como la unión con los vecinos. Se está creando un ambiente de cercanía y familiaridad y las Hermanas estamos animadas a dar y acoger estos pequeños signos de comunión
Además notamos que estamos de diferentes religiones, pero unidos como vecinos en la misma fe y creencias y nos encontramos en el momento de los aplausos.
En nuestra comunidad, seguimos la Eucaristía de este Domingo de Ramos con Papa, por TV, lo cual es un gran privilegio. En el transcurso de la celebración eucarística, recibimos la comunión, de las formas de nuestro Sagrario y por la tarde tuvimos Adoración al Santísimo. El día transcurrió orando y contemplando la Pasión de Jesús, concretada en los que más sufren; el dolor de nuestro mundo, Hermanas y familiares.
Cada día, nuestra comunidad es una iglesia doméstica; participamos en la eucaristía a través de 13 TV. En su momento tomamos la Comunión gracias a las formas conservadas en el sagrario. Y, cada día, oramos por los difuntos y enfermos del CORONAVIRUS, pidiendo al Señor aleje esta pandemia que afecta al mundo entero. Y también, cada tarde, oramos ante el Santísimo expuesto en nuestra capilla con la misma intención.
El Domingo de Ramos nos unimos a la celebración presidida por el Papa Francisco. ¡Qué impresión ver la Basílica de San Pedro vacía!
Todo este tiempo estamos viviendo con íntima unción todas las celebraciones uniéndonos a la humanidad doliente. Nuestro Padre Luis fue MOVIDO A COMPASIÓN.
Con el Domingo de Ramos, comenzaba la Semana Santa. En ese clima de recogimiento, nos vamos disponiendo para vivirla así, como Dios quiere que sea este año, muy en comunión con todas las Hermanas, la Iglesia y todos nuestros hermanos, incluso con quienes ni siquiera conocemos.
En la víspera de Jueves Santo las hermanas educadoras de los hogares pensamos la forma de llegar a los niñ@s de los hogares Larrasolo y Argileku, en este día del amor fraterno ya que no nos podíamos reunir a comer los dos hogares como años anteriores, por el COVID-19.Pensamos que cada hogar eligiese un nombre de niñ@ del otro hogar y pensara e hiciera algún detalle y luego las hermanas haríamos de mensajeras.Explicamos en cada Hogar en que iba a consistir esta actividad y el sentido de este día para ellos amigos, compañeros….Algunos las vísperas otros la mañana del jueves la pasaron haciendo manualidades para que a mediodía llegasen los regalos. Cuanta ilusión y espera. Todos pensaron lo que más le podría gustar a su amigo/a y fue una experiencia fenomenal
MADRID, CURIA PROVINCIAL
Los símbolos que preparamos nos ayudaron a centrarnos más en este Jueves Santo, día del amor fraterno, en el que Jesús nos dejó el memorial de su entrega hasta el extremo, en el pan y el vino. La jofaina y el agua para lavarnos los pies los unos a los otros, porque esta es la señal por la que nos reconocerán como discípulos suyos, si nos amamos unos a otros como El, el Maestro nos ha amado. Gracias a los medios de comunicación se nos brinda la posibilidad de participar de los oficios y en este día, de la Eucaristía en la Cena del Señor.
Semana Santa 2020
Santuario Nuestra Señora de Montiel 2-7 enero 2020
El Papa Francisco afirmó que la salvación consiste en una elección personal entre “acudir al encuentro con el Señor o cerrarme en mis cosas” y recordó que Dios “no nos hace paga entrada” para para acudir a Él.
El Santo Padre, en la Misa celebrada este martes 5 de noviembre en la Casa Santa Marta, comentó a lectura del Evangelio de San Lucas en la que se narra la historia de un hombre que organiza una gran fiesta a la que los invitados rechazan acudir con diferentes excusas.
Ante la negativa de sus invitados, el hombre decide entonces invitar a los pobres y a los lisiados de los caminos y sentarlos a su casa a cenar, ofreciéndoles a ellos la fiesta que tenía reservada para sus amigos.
El Papa explicó que “la cena, la fiesta, representa el cielo, la eternidad con el Señor”. La acción del hombre que organizó la fiesta describe la actitud de Dios hacia la humanidad: “Nuestro Dios siempre nos invita de ese modo, no nos hace pagar entrada”.
“En las verdaderas fiestas no se paga entrada: paga el padrón, paga el que invita”, resaltó. Sin embargo, los amigos del hombre que preparó la fiesta no reaccionaron del mismo modo, sino que respondieron cerrándose sobre sí mismo, sobre sus intereses.
El Pontífice lo explicó señalando que “delante de aquella gratuidad, de aquella universalidad de la fiesta, respondieron con una actitud que cierra el corazón: ‘Yo no voy. Prefiero estar solo, con la gente que me gusta a mí. Me cierro’”.
“Eso es un pecado”, advirtió el Papa Francisco. “Es el pecado del pueblo de Israel, el pecado de todos nosotros. El cerrarse. ‘No, para mí es más importante esto que eso. No, lo mío’. Siempre lo mío”.
El rechazo a acudir a la fiesta es también un rechazo al Señor, advirtió el Papa. Es decirle: ‘No me molestes con tu fiesta”. Supone cerrarse a “aquello que el Señor nos ofrece: la alegría del encuentro con Él”.
“Y en el camino de la vida muchas veces nos encontraremos ante esta elección, ante esta opción: o la gratuidad del Señor, o el acudir a encontrar al Señor, encontrarme con el Señor, o cerrarme en mis cosas, en mis intereses”.
Por ese motivo, “el Señor, hablando de una de las formas de cerrarse, decía que es muy difícil que un rico entre en el reino de los cielos. Sin embargo, hay muchos ricos buenos, santos, que no están atados a las riquezas. Pero la mayoría se ata a las riquezas, se cierra. Y por ello no pueden comprender qué es la fiesta”.
El Papa finalizó la homilía invitando a pensar en esa parábola y preguntarse: “¿Cómo va nuestra vida? ¿Qué es lo que prefiero? ¿Aceptar la invitación del Señor o cerrarme en mis cosas, en mis pequeñeces?”.
Lectura comentada por el Papa Francisco:
Lucas 14, 15-24
En aquel tiempo, uno de los comensales dijo a Jesús:
«¡Bienaventurado el que coma en el reino de Dios!».
Jesús le contestó:
«Un hombre daba un gran banquete y convidó a mucha gente; a la hora del banquete mandó a su criado a avisar a los convidados:
“Venid, que ya está preparado”.
Pero todos a una empezaron a excusarse.
El primero le dijo:
“He comprado un campo y necesito ir a verlo. Dispénsame, por favor”.
Otro dijo:
“He comprado cinco yuntas de bueyes y voy a probarlas. Dispénsame, por favor.”
Otro dijo:
“Me acabo de casar y, por ello, no puedo ir.”
El criado volvió a contárselo a su señor. Entonces el dueño de casa, indignado, dijo a su criado:
“Sal corriendo a las plazas y calles de la ciudad y tráete aquí a los pobres, a los lisiados, a los ciegos y a los cojos”.
El criado dijo:
“Señor, se ha hecho lo que mandaste, y todavía queda sitio”.
Entonces el señor dijo al criado:
“Sal por los caminos y senderos e insísteles hasta que entren y se llene mi casa.”
Y os digo que ninguno de aquellos convidados probará mi banquete».