AÑO “FAMILIA AMORIS LAETITIA”

“LA FAMILIA A LA LUZ DE LA PALABRA” y “LA VOCACIÓN DE LA FAMILIA” son los títulos de los vídeos- reflexión 2 y 3 del Papa Francisco y testimonios de familias del mundo para este año FAMILIA AMORIS LAETITIA:  https://youtu.be/Exi8lsoIx2s; https://youtu.be/6m6W_8sz8Pw .

El amor de Dios lo podemos ver con nuestros ojos en la realidad concreta de la FAMILIA, nos dice el Papa Francisco, en el matrimonio que es un Encuentro de amor. El amor conyugal “escultura viviente” que manifiesta a la familia, amor total y de entrega hacia el otro, amor de donación, amor que impulsado y animado día a día por los esposos que entregan sus dones al servicio de la familia, la van edificando y construyendo en una Iglesia doméstica, en la que el amor es la fuerza interior.

De ello nos habló Luis Amigó en su exhortación apostólica “Sobre el matrimonio”:

“…debéis amaros los esposos; con amor firme y constante, que no decrezca por las vicisitudes, contrariedades y trabajos, propios de vuestro estado; que estéis siempre prontos y dispuestos a sacrificaros el uno por el otro, sobre todo cuando os visite el Señor con la enfermedad, sin reparar en vuestro bienestar y salud; que entrambos mucha solicitud en procurar lo necesario para atender a la sustentación y otras necesidades de vuestra familia…” (OCLA 1429)

La invitación del Papa Francisco en el vídeo LA VOCACIÓN DE LA FAMLILIA, es acompañar a las familias con las actitudes de Jesús, muy propias de nuestro carisma: misericordia y ternura, para que estas se vayan construyendo en pilares de Evangelización. Es el sacramento del matrimonio en el que la familia recibe la gracia de ser luz para el mundo. Y una vocación a la santidad, como exhortó Luis Amigó en el año 1930 a los fieles de la diócesis de Segorbe (Castellón):

“… amados hijos, los que habéis sido llamados por Dios al estado del matrimonio, tened entendido que en él quiere el Señor que os santifiquéis como se santificaron tantos otros, que hoy veneramos en los altares… los que ya os halláis en este estado de matrimonio, amaos, mutuamente, mantened la fidelidad prometida, abrazaos a las cruces propias del estado, procurad ser para vuestros hijos unos buenos padres y de este modo seréis beneméritos de la sociedad y sobre todo, bendecidos de Dios en el tiempo y en la eternidad.” (OCLA 1431)

¡Cada familia es insustituible, es un don para la sociedad, para la Iglesia! Como agentes de Pastoral Familiar acompañemos a las familias, caminemos junto a ellas en la construcción de la Iglesia “familia de familias”.

Hna. Mª C. Michitorena, Hna. Manolita P. y Horacio S. EPF  P.Nazaret