
El corazón del Padre Fundador “ardía en Caridad hacia Dios y hacia el prójimo, como lo reflejan sus escritos, lo aseguran unánimes los testigos y lo confirman sus obras apostólicas. El mismo escribió: “No es posible amar a Dios sin amar también por Él al hombre, su obra predilecta; ni amar a éste con verdadero amor de caridad, si se prescinde del amor a Dios. Ambos amores son como flores de un mismo tallo”.
(Decreto de la Venerabilidad)
CELEBRACIÓN ENVIADA POR EL EQUIPO DEL M.L.A. CONGREGACIONAL
